viernes, 26 de noviembre de 2021


             Combarro,, paseando entre hórreos 


       El pueblo marinero de Combarro es uno de los rincones más bellos de Las Rías Bajas. Su centro histórico está plagado de hórreos y cruceros que desprenden tradición y están muy vinculados al pueblo marinero.
        Los hórreos también llamados palleiras, los cruceros, las casas marineras de piedra con sus soportales y balcones abundan en el pintoresco  Conjunto Histórico de Combarro, ubicado en el municipio de Poio. Un pueblo marinero con mucho encanto que se asoma al mar: en sus calles no faltan los aperos de pesca y a pesar de su reducido tamaño, son muchos los establecimientos en los que se puede degustar su gastronomía o comprarse unos recuerdos típicos











Crucero de la plaza de la Fuente

         En los cruceros, si la Virgen está en la parte alta siempre mira al mar, y cuando tiene un Cristo siempre está orientado a tierras

        Plaza de San Roque y al fondo una casa del siglo XVIII con balcón de piedra que termina en escaleras, más típica de pazos y monasterios.







   Plaza de la Fuente y detrás el crucero que representa a La Piedad que aún conserva su altar  


                                                                           Rua do Mar.

                                                                Rua do Mar.

                                                                Rua do Mar, calle típica



                                                                Rua do Mar

                                    Callejeando por las callejuelas  de Combarro

Piruletas de pulpo acompañadas con una botellita de vino del ribeiro, Casal de Armán 

Playa de O Padrón, esta playa que se ve al fondo es de arena oscura, está resguardada del viento y con la subida de la marea desaparece totalmente.

jueves, 25 de noviembre de 2021

   

   Ponte Maceira, una BELLEZA en mayúsculas 


         Paseo por uno de los pueblos que tienen el honor de haber sido distinguido dentro de los pueblos más bonitos de España, entre ellos ya figura, desde diciembre de 2019, el diminuto pueblo de Ponte Maceira, un pequeño conjunto etnográfico situado en la parroquia de Portor, (atravesado por el río Tambre) en Negreira (A Coruña).
        En primer lugar veremos el gran puente medieval de piedra también llamado "Ponte Vella", que según cuentan, sus orígenes fueron romanos siglo XIII. Siglos después, en el XVIII, fue reformado, teniendo el aspecto actual. Consta de cinco arcos de sillería y otros dos de pequeño tamaño y el arco central es ogival.
        Ponte Maceira es la primera localidad coruñesa que se incorpora a esta lista (pueblos más bonitos de España), la verdad es que se lo merece, porque el pueblo es bellísimo y, a pesar de su reducido tamaño, tiene todo aquello que nosotros buscamos en su enclave rural: un entorno bonito, casas de piedra, calles empedradas, un puente medieval, molinos a pie de río y un espléndido pazo. 


















                                                         Pazo de Baladrón




                                                             Arco ojival


        La capilla de San Brais o San Blas, también conocida como capilla del Carmen fue construida en el siglo XVIII y posteriormente en el siglo XIX se le incorporó un ábside semicircular neorrománico. 




 
Molinos de agua totalmente restaurados



                                                        Interior de Molino

                                             Presa para alimentar los molinos

                               Pazo de Baladrón construido entre los años 1945 y 1955


                                                            Pazo de Baladrón




        Restaurante Ponte Maceira, tienen el menú del día para los peregrinos, es un antiguo molino, desde el comedor hay una vista preciosa del puente y la presa.

Leyendas del puente

              Cuentan que escapando los discípulos del Apóstol de los romanos para encontrar un lugar donde enterrar al propio Santiago, cruzaron el puente y al pasar sus perseguidores sobre el, este se vino abajo, gracias según la leyenda a la intervención divina.

               También conocida fue la batalla en el siglo XII, entre las tropas de Diego Xelmirez arzobispo de Compostela, y los hombres de Pedro Froilaz de Trava y sus hijos Fernando y Bermudo